Viaje a la historia y el legado del Café-Teatro-Salón de Es Castell

Un buen día, a través de unos amigos, llegó a oídos del realizador mallorquín Pere Antoni Sastre la existencia en los años 80 del mítico y pionero local de transformismo y cabaret Café-Teatro-Salón, con sede en Es Castell. Una historia que le cautivó desde el primer momento y que cuatro años después se ha convertido en su opera prima, que esta tarde (19 horas) se estrenará en la sala 1 del cine Augusta de Palma en el marco del Atlàntida Film Fest.

Coincidiendo con el 20 aniversario de su cierre, el emblemático lugar es noticia gracias a «El salón», que es como se titula el documental, un trabajo con el que el realizador se centra en recuperar la historia del atrevido espacio de ocio. Un viaje audiovisual,    en el que se funden elementos como la belleza, decadencia y vitalidad, por las ruinas del teatro y las esperanzas de quienes aspiran a mantener vivo su legado. Mientras, por otra parte, cabe recordar al respecto que existe un proyecto para que el lugar sea recuperado como centro cultural en el pueblo.

Explica Sastre que el camino no ha sido fácil y el proceso de documentación, con pocos recursos encontrados en internet, largo. La gran suerte ha sido poder contar con el testimonio en primera persona del alma del    Cafe-Teatro-Salón, Andrés Ferrer. Tras un breve contacto inicial, el realizador se aventuró a entrar por teléfono en un programa de Radio Es Castell y preguntar en directo a su presentador (Ferrer) si estaría dispuesto a colaborar en el rodaje de un documental. Afortunadamente, la respuesta fue positiva y precisamente con esa conversación arranca el metraje.

Un toque ochentero

Así, el eje narrativo del filme es el propio Ferrer. El encargado de narrar la historia e introducir a personajes clave que forman parte de ella hasta llegar a ese grupo interesado en recuperar el legado del Salón. Todo ello acompañado de material audiovisual y fotográfico de archivo. Confiesa Sastre que también ha aportado su particular mirada, «con un ejercicio de imaginación, sin influir en la lectura de la historia. En la película hay una gran construcción formal, estética y plástica importante. Hemos intentado que parezca como un documental de los años 80».

Pere Antoni Sastre, que hasta la fecha había hecho trabajos dentro del mundo de la producción (participó en el equipo de «El vientre del mar», de Agustí Villaronga), reconoce que su estreno en la dirección «ha sido una experiencia un poco dura, pero también excitante.Hemos improvisado mucho y también jugado mucho con el factor sorpresa».

Sobre la figura de Ferrer, recuerda que puso en marcha el proyecto «en una época en la que había una falta de desinhibición tanto en lo personal como en lo público y ocupó un escenario que era necesario». Una apuesta, relata, «que costó en el principio el hecho de que dos o tres hombres se vistieran de mujer en un tono paródico, pero al final supieron meterse tanto a su pueblo, Es Castell, como a la Isla en el bolsillo». A su juicio, «el mérito es que crearon un local en el que todas las ideologías convivían, con gente de todo tipo».

En el metraje aparecen otras figuras protagonistas, como fue Paco Victory, que está previsto que asista esta tarde al estreno. En el caso de Ferrer, la idea es que lo haga en la premiere en Menorca, aún sin fecha, pero que para el director será la gran fiesta del proyecto. Mientras tanto, la idea es que el documental continúe haciendo el circuito de festivales. Lo que sí está confirmado es que en su día se programará en IB3.

«El Salón» compite en el Atlàntida Film Fest dentro de la sección Talent Balear con otras seis producciones. La muestra cinematográfica, inaugurada el pasado viernes, se prolongará hasta el 28 de este mes.

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