Situado en un campus que abarca dos impresionantes ubicaciones, uno en Rolle, cerca del lago Lemán, y otro en Gstaad, en los Alpes suizos, Le Rosey se traslada entre estos dos lugares según la estación del año. Durante el invierno, los estudiantes disfrutan de las instalaciones de esquí de Gstaad, mientras que en los meses más cálidos, la escuela se establece en el idílico campus de Rolle. Esta dualidad no solo permite a los estudiantes disfrutar de diversas actividades deportivas y recreativas, sino que también promueve una apreciación del entorno natural suizo.
La institución es conocida por su enfoque multilingüe y multicultural. Los estudiantes, que provienen de más de 60 países diferentes, son instruidos en inglés y francés, los dos idiomas oficiales del instituto. Además, se ofrecen clases de español, alemán, italiano y otros idiomas, fomentando una educación verdaderamente global. Este entorno internacional prepara a los estudiantes no solo académicamente, sino también social y culturalmente para un mundo globalizado.
Le Rosey no es solo una escuela, sino un microcosmos de la sociedad global de élite. Sus instalaciones incluyen un teatro de última generación, múltiples canchas de tenis, una piscina olímpica, campos de golf y fútbol, y un centro ecuestre. Los estudiantes también tienen acceso a laboratorios científicos avanzados, estudios de arte y música, y un extenso programa extracurricular que abarca desde robótica hasta navegación.
El riguroso programa académico de Le Rosey sigue los currículos del Bachillerato Internacional (IB) y el sistema francés de Baccalauréat, lo que proporciona una sólida base para la educación superior. La mayoría de los graduados de Le Rosey son admitidos en prestigiosas universidades de todo el mundo, incluyendo Oxford, Cambridge, Harvard y el MIT. El énfasis en la excelencia académica es complementado por una educación en valores, liderazgo y responsabilidad social.
Exalumnos ‘top’
La exclusividad de Le Rosey también se refleja en su lista de exalumnos, que incluye a numerosos miembros de familias reales, líderes empresariales y figuras prominentes en diversos campos. Este networking de alto nivel es uno de los muchos beneficios que atraen a las familias más adineradas y poderosas del mundo.
Por ejemplo, en esta lista encontramos rey Juan Carlos
