Andrés Pajares y su ‘tormentoso’ vínculo con Mallorca

La Revuelta recibió este lunes a Andrés Pajares, que le presentó a David Broncano un libro sobre sus memorias, publicado en 2019. A pesar de que el actor español está totalmente alejado del foco mediático, aprovechó la visita al programa de TVE para contar algunas anécdotas de su dilatada carrera en el cine y también de su faceta más personal. Una vida llena de escándalos, amores y polémicas que, aunque en el libro casi no menciona, estuvieron muy vinculadas a Mallorca en la década de los noventa.

El icono del cine comenzó en el mundillo con tan solo nueve años interpretando una canción en los estudios de Radio Madrid en la Gran Vía y consiguió alzarse con el Goya a Mejor Actor con ‘Ay Carmela’. Desde entonces empezó a ocupar portadas de las revistas del corazón con las polémicas amorosas y familiares. Desde su tormentosa relación con su hija Mari Cielo Pajares, su divorcio con Chonchi Alonso o su tormentosa relación con la mallorquina Chonchi Jiménez.

Jiménez y Pajares disfrutaban de su amor en la Isla a finales de los noventa.

La vinculación del actor con la isla empieza en 1197 cuando tras separarse de la madre de sus segunda hija, Mari Cielo Pajares, conoce a la que sería su nuevo amor durante unas vacaciones en Mallorca. Conchi Jiménez, una fisioterapeuta que trabajaba en la Isla y que su familia regentaba una panadería en el barrio de Coll d’en Rabassa, supuso un bálsamo para el actor. Durante el tiempo que duró la relación era habitual verles disfrutar de las playas en la Isla, navegar por la costa y alojarse en lujosos hotel, durante años fueron habituales del hotel Valparaíso de Palma.

Casi desde el primer momento no ocultaron sus sentimientos, y lo que en principio pudo parecer una aventura de un verano, se consolidó como una pareja sólida. Tanto es así que a los pocos meses, Jiménez dejó la isla para irse a vivir junto al actor a su piso del madrileño barrio de Chamberí. De hecho, los reporteros de este periódico pudieron captar a la pareja en sus numerosa escapadas a la Isla.

Pajares y Jiménez eran unos habituales del verano mallorquín.

Fue en 2003 cuando se acabó el amor y empezó una tormentosa relación entre la pareja. Conchi Jiménez denunció al actor por presuntas amenazas de muerte y, pese a ser absuelto de este delito, éste fue el comienzo de una peregrinación familiar por los platós de televisión. Tras romper con la mallorquina, el culebrón del cómico se acrecienta con Eva, su hija secreta de una relación oculta.

Su situación cambia tras la llegada de su actual mujer, Juani Gil, treinta años menor que él y con quien contrajo matrimonio en 2019. Desde hace unos años, Pajares pasa su vida más alejado del foco mediático. Actualmente tiene una vida más familiar, y a sus 84 años disfruta de su privacidad.

Enlace de origen : Andrés Pajares y su 'tormentoso' vínculo con Mallorca